lunes, 7 de mayo de 2007

Taller de Tapas

C. de l'Argenteria, 51
Tel. 93 268 85 59




Lucila dice:
Aprovechando la visita de nuestra amiga Nuria, de tour por el viejo continente, qué mejor ocasión que pasar por el Taller de Tapas y degustar el mundialmente famoso tapeo español.
A pesar del calor sofocante (el aire acondicionado estaba roto) y de la gran cantidad de gente, sobre todo guiris, el Taller de Tapas hace honor a su nombre ofreciendo una variada carta de tapas (patatas bravas, chipirones, jamón, olivas, escalivada, pulpo, etc.) que permite introducirnos al delicioso mundo del tapeo español.
Si bien las raciones no son muy abundantes, sobre todo para estómagos hambrientos, hay que reconocer la calidad y buen sabor de su cocina.
Mi puntuación: y ½

Andrés dice:
Lo mejor que tiene este restaurante es que resulta ideal para llevar a gente que visita por primera vez Cataluña. Tiene su cara tradicional (al fin y al cabo, tiene una extensa y variada oferta de tapas) pero pasado por un filtro moderno muy típico de Barcelona, así que es perfecto para que los guiris con miedo a entrar en un bareto grasiento a comer tapas las conozcan de primera mano sin renunciar al diseño de la BCN post-olímpica. Si sois fanáticos de las tapas tradicionales, seguramente os decepcionará: las raciones son escasas y presentadas al estilo modernito. Si no habéis comido nunca tapas, puede ser una buena opción para probarlas. Disponen del clásico repertorio ibérico (jamón, queso, calamares a la andaluza, boquerones, patatas bravas...) y le añaden un plus de catalanidad (pa amb tomàquet, botifarra, crema catalana). En mi ránquing de patatas bravas, se quedan a media tabla: vienen presentadas en plato, con corte tradicional y con doble salsa (picante y allioli), bastante grasientas, pero buenas. Si viene a visitaros alguien de fuera y queréis quedar bien, es una muy buena opción. Yo lo he hecho varias veces y me funciona.
Mi puntuación:

3 comentarios:

Anónimo dijo...

como alternativa, más abundante, grasienta y tradicional, propongo la esquinica, en fabra i puig.

y bueno, felicidades por el blog! a ver cuándo degustamos algo juntos! patri me debe un ruscalleda... a ver si se estira!

Anónimo dijo...

Si la patricia invita, me apunto! Habría que verlo para creerlo...

Anónimo dijo...

a ver, pero qué os habéis pensado?! que una nada en la abundancia?! pues no! así que de invitaciones para paladares exisitos las justas y en ocasiones especiales. Sin embargo, ya sabéis que yo me dejo invitar siempre! Por cierto, poco trabajo tenemos como para irnos dedicando a críticos culinarios, no? Podrías buscar patrocinador y hacerme una sección...